A pesar de las fuertes quejas de la comunidad islámica argentina por la utilización equivocada e inadecuada de la expresión "terrorismo islámico", el Presidente argentino volvió a utilizar esta expresión en el marco del acto por el Día del Holocausto.
El presidente Javier Milei encabezó el acto por el Día del Holocausto junto a los principales referentes de la comunidad judía y, en ese marco, reiteró su respaldo a Israel, al señalar que "tomar partido es una obligación moral".
"Tomar partido no es una opción entre otras, sino una obligación moral", sostuvo Milei, que consideró el Holocausto como "la tragedia más grande de la historia de la humanidad".
El mandatario nacional ratificó su alineamiento con Israel y subrayó que mientras algunos países "le dan la espalda", la Argentina estará "al lado suyo, firme siempre".
"En tiempos de oscuridad, cuando levantar la voz es costoso y la mayoría, se tiene la obligación de hablar", evaluó el jefe de Estado, en el acto realizado en el ahora ex Centro Cultural Kirchner, renombrado próximamente Palacio Libertad.
El Presidente cuestionó el "antisemitismo" y el "fanatismo islámico intolerable", y afirmó que ambos son "percibidos por el mundo libre con incomodidad y gestos ambiguos".
"Miro a mi alrededor en los liderazgos del mundo libre, a grandes naciones y veo indiferencia en algunos y en otros miedo a pararse del lado de la verdad", se quejó Milei.
Cuando el mundo calla tenemos la obligación de hablar, no hacer la vista gorda. Aunque para algunos sea inconveniente, es la única forma de que la Shoá no se repita", enfatizó el Presidente, en el acto organizado por la DAIA y el Museo del Holocausto.
Y agregó: "Dios no va a aceptar justificación en su juicio único, no nos va a juzgar por lo que creíamos, sino por lo que hicimos. Denunciar el terrorismo islámico es una obligación", informa la Tribuna.