La académica saudita Badriya bint Mazen Al-Otaibi logró liderar a los investigadores de nanotecnología de la Universidad de Flinders, Australia, para producir un grupo de diferentes tipos de nanopartículas de oro controlando el flujo de agua en un nuevo dispositivo de fluido vórtice, sin necesidad de productos químicos tóxicos.
El trabajo del Laboratorio de Química Verde de la Universidad de Flinders también condujo a la formación de nanooro y al descubrimiento de una reacción que condujo a la separación de moléculas de agua en el dispositivo, lo que condujo a la generación de hidrógeno y peróxido de hidrógeno.
La cooperación de científicos, dirigida por la investigadora saudita Al-Otaibi, dio como resultado el desarrollo del tamaño y la forma de las nanopartículas de oro en el agua. Durante esta investigación, descubrieron un nuevo fenómeno en el dispositivo de fluido vórtice. "El proceso de electrificación por fotocontacto en la interfaz sólido-líquido que puede utilizarse en otras reacciones químicas y biológicas".
Por su parte, la becada saudita Badriya Al-Otaibi expresó su orgullo como ciudadana saudita liderando un equipo de investigación conformado por investigadores australianos, chinos y malayos, y bajo la supervisión del profesor australiano Colin Ruston, y afirmó: “También hemos logrado la síntesis de nanopartículas de oro puro en agua, sin el uso de productos químicos de uso común, “reduciendo así al mínimo los residuos en el medio ambiente”.
Al-Otaibi añadió:"El descubrimiento representa un salto cualitativo en cómo fabricar nanomateriales de manera controlada utilizando agua como agente limpio y una reacción amigable con el medio ambiente sin necesidad de otros químicos, lo que contribuye a avanzar hacia una química limpia para un futuro más sustentable.".