Las llegadas a Marruecos no cesan tal y como lo confirmó el pasado miércoles la ministra de Turismo, Fatima-Zahra Ammor. “Pese a que estamos en el proceso de recopilación de datos, todos los indicadores señalan que los resultados son positivos”, aclaró.
Según los datos presentados por el Ministerio de Turismo, la región de Souss-Massa registró un aumento del 8% en el número de pernoctaciones y un aumento del 4% en las llegadas. El norte, incluidos Tánger, Asila y M’diq-Fnideq, registró un aumento del 12% en las y un aumento del 11% en las llegadas. Marrakech, una de las ciudades más visitadas del país, también registro un aumento del 6% y el 8%.
La región de Dajla-Oued Eddahab, región donde priman los deportes acuáticos y el turismo de playa, también vio como mejoraron sus cifras. Pese a estar más alejado del resto de grandes ciudades del país, la región de Dajla fue la que más creció con un 32%. Esta cifra es el claro ejemplo de que las inversiones en infraestructuras y conectividad funcionan en el corto y medio plazo.
En la misma declaración, Ammor aclaró que los resultados de las regiones orientales no cumplieron con las expectativas, pero aun así obtuvieron un crecimiento notable a comparación con las aportadas por el Ministerio en 2023.
Gracias a los resultados el Ministerio aportados por La Oficina Nacional Marroquí de Turismo (ONMT) y la Confederación Nacional de Turismo (CNT) se prevé que los ingresos de este año superen con creces 10.500 millones de dólares en ingresos. Con el objetivo de aumentar las cifras la ministra presentó el proyecto Kafaa, según Atalayar.