Unos 50.000 fieles realizaron las oraciones del viernes en la bendita Mezquita de Al-Aqsa, en medio de estrictas medidas militares impuestas por las autoridades del ejército israelí, con el objetivo de obstruir el acceso de los fieles a la mezquita.

El Departamento de Dotaciones Islámicas declaró hoy, viernes 13 de diciembre de 2024, que los fieles pudieron llegar a la mezquita a pesar de las restricciones impuestas, que incluían arrestar y registrar a jóvenes cerca de las Puertas de los Leones y Al-Sahira, e impedir que muchos de ellos entraran. 

Las autoridades del ejército israelí privan a miles de palestinos residentes en Cisjordania del acceso a la mezquita de Al-Aqsa para orar, exigiéndoles obtener permisos especiales para cruzar los puestos de control militares que rodean Jerusalén, en medio de un endurecimiento de todos los procedimientos de circulación.

Estas medidas forman parte de una política represiva en aumento desde el inicio de la agresión israelí integral en octubre de 2023, que tuvo como objetivo la Franja de Gaza y Cisjordania, pero también Jerusalén, donde las restricciones al ingreso a la Mezquita de Al-Aqsa y a la Ciudad Antigua se intensificó, lo que aumenta el sufrimiento de los palestinos al practicar sus rituales religiosos.