Con los tiempos que corren, cada vez es mayor la presencia del islam en Occidente y Europa, un continente mayoritariamente cristiano. A medida que han pasado los años, lo cierto es que el número de musulmanes ha crecido considerablemente en muchos países y territorios de nuestro planeta. Y con ello, también la aparición de mezquitas, lugar de culto islámico.
Si bien en algunos lugares como Alemania, Francia o incluso España hay miles de estos edificios religiosos, lo cierto es que en algunos países del mundo, aunque son pocos, no hay registrada ninguna mezquita de forma oficial, amén de que existan otros lugares de reunión de religiosos.
Quizás el que menos sorprende es Ciudad del Vaticano. Este microestado europeo, sede del cristianismo y lugar de residencia del Papa, es el territorio más pequeño del mundo, albergando la Basílica de San Pedro. Por su poco espacio, así como su importancia en la religión cristiana, no alberga ninguna mezquita. Lo que le hace uno de los pocos territorios de Europa que no cuenta con la zona de culta del islam.
También hay otros casos como Mónaco, Liechtenstein, San Marino o Andorra, otros microestados europeos en el que su población es pequeña y la presencia musulmana es muy baja, además de que apenas hay espacio para la construcción de mezquitas.
Solo Malta, de entre los microestados europeos, cuenta con mezquitas, siendo la más destacada la Mezquita Mariam Al-Batool en Paola. Quizás su cercanía a África es clave para que la comunidad musulmana sea alta y existan de manera oficial estos edificios.
Lejos de estos, el resto de países europeos cuenta con mezquitas de forma oficial, al menos todos los países de la Unión Europea. Eslovaquia fue el último de la UE en tener estos lugares de culto del islam, pues hasta 2014, no había registrada ninguna, según La Razón.