El hombre sospechoso de matar a un musulmán en una mezquita en el sur de Francia seguía prófugo el domingo, manifestaron las autoridades, en un incidente descrito por el primer ministro François Bayrou como "islamofóbico".
Ambos hombres estaban solos en la mezquita en la antigua ciudad minera de La Grand Combe el viernes cuando la víctima fue apuñalada. Según los informes, el agresor grabó el ataque en su teléfono, y las imágenes de las cámaras de seguridad lo mostraron gritando insultos a "Allah", que significa Dios en árabe, informaron los medios locales.
El fiscal local Abdelkrim Grini indicó el domingo que los investigadores están considerando "la posibilidad de que este fue un acto islamofóbico. Es la hipótesis que estamos manejando por ahora, pero no es la única", afirmó.
Grini manifestó que las imágenes del apuñalamiento que vio como parte de la investigación eran "horribles" y que las fuerzas policiales estaban trabajando sin descanso para intentar arrestar al sospechoso, con 70 investigadores desplegados.
"El racismo y el odio basados en la religión nunca tendrán lugar en Francia", expresó el presidente francés Emmanuel Macron. "La libertad religiosa es inviolable".
La Gran Mezquita de París condenó el ataque en un comunicado y apuntó que la víctima acababa de terminar de limpiar la mezquita cuando fue asesinada, informa AP.
El ministro de Justicia, Gérald Darmanin, denunció el "asesinato despreciable" que "hiere los corazones de todos los creyentes, de todos los musulmanes en Francia".