El término “Allah” significa simplemente “Dios” en lengua árabe (lit.: “el Dios”, con el artículo definido). Es de uso común por todos los arabófonos, en multitud de expresiones ordinarias del idioma, tanto por musulmanes como por cristianos y judíos de habla árabe que viven desde hace siglos en países musulmanes. Presentar esta palabra como designando “al dios de los árabes” o “de los musulmanes” es una distinción absurda, como lo sería afirmar que God es el dios de los ingleses o Gott el de los alemanes. Algunos idiomas de pueblos musulmanes han incorporado la palabra “Allah” para designar al Dios único mientras que otros conservan términos propios. Lingüísticamente la palabra “Allah” ha servido para designar a Dios en todas las lenguas semíticas que han servido de soporte escriturario de las grandes religiones abrahámicas. “Allah” es la palabra “Ilah” con artículo, y se corresponde exactamente con el Eloh (Elohim) hebreo, y con el “Alaha” del arameo que hablaba Jesús.